GACHAS DULCES CON MATALAHUVA

 Conocido como Gachas dulces, Talvinas o Poleás este postre es tradicional de la Fiesta de todos los Santos, consumida en muchas provincias andaluzas.

Hoy este día ha transcurrido diferente como todo lo que se está celebrando últimamente, sin la visita al cementerio para visitar a nuestros difuntos.

Recuerdo desde niña que a primera hora de la mañana nos acercábamos a poner unas velas, ya que en mi caso las flores las dejábamos puestas el día anterior.

Allí hacíamos el recorrido de todos los familiares que teníamos y concluida la mañana nos marchábamos para comer y volver a ir por la tarde en muchos casos.

Este postre se comía este día en muchas casas, aunque en mi casa no había mucha tradición de él, por lo menos no lo recuerdo.

Es un postre energético elaborado con ingredientes humildes y que en época de necesidad quitó mucha hambre.

Los ingredientes básicos de esta receta son aceite, harina, azúcar y leche, cuya mezcla nos da como resultado una especie de natillas espesas, el aroma lo aporta el limón, el anís o matalahúva y la canela.

Estas gachas dulces se acompañan con crujientes picatostes, en algunos casos con almendras, pasas y se suelen regar también con miel.

Yo os dejo la receta tradicional, sin más añadidos y que desde luego está para relamer el bol.

Si no os gustan demasiado espesas admite un poquito más de leche, como unos 50 ml.

Con las cantidades que os doy quedan espesitas y deliciosas.


Tanto templadas como frías están buenísimas. Al enfriar espesan un poco mas.


Y así quedan terminadas, sencillas pero con un sabor riquísimo.

En primer lugar ponemos la leche a calentar con la corteza de limón y la rama de canela

Freímos los picatostes, sacamos de la sartén y ponemos sobre papel de cocina


Freímos el anís y retiramos del aceite


Echamos la harina, tostamos ligeramente en el aceite y vamos echando la leche poco a poco


Cocinamos a fuego suave hasta que las gachas estén hechas.


Las ponemos en un bol elegido, decoramos con canela molida y picatostes y listas para comer, bien templadas o frías


Ingredientes

medio litro de leche entera
1 cascara de limón
1 palo de canela

100 ml de aceite de oliva
1 cucharada de postre de matalahúva o anís en grano
2 cucharadas soperas rasas de harina de trigo
80/100 g de azúcar, al gusto de dulces


canela molida para decorar
2 rebanadas de pan, del día anterior, para picatostes

Elaboración 

Ponemos la leche a calentar en un cazo junto a la cascara de limón y el palo de canela.
Cuando rompa a hervir retiramos del fuego y dejamos infusionar mientras preparamos la mezcla.

En una sartén o cazuela ponemos el aceite a calentar.
Freímos el pan cortado pequeñito. Sacamos y ponemos a escurrir sobre papel absorbente.
Seguidamente echamos en el mismo aceite los granos de anís o matalahúva y dejamos freír unos segundos.
Yo lo he colado del aceite, pero hay quien deja el anís.
Incorporamos la harina en el aceite caliente y sofreímos unos segundos hasta que esté ligeramente tostada, como cuando hacemos una bechamel.
La leche la colamos y la vamos echando sobre la harina poco a poco, debe estar templada la leche para que no haga grumos.
Removemos continuamente durante 5 minutos hasta que espese la mezcla y se cuezan las gachas.
En ese momento echamos el azúcar y seguimos mezclando con cuidado. Yo le he puesto en este punto unos granos de anís de los que hemos frito anteriormente.
Una vez terminadas de hacer, echamos las gachas dulces repartidas en dos bol o cazuelitas de barro, decoramos con picatostes y espolvoreamos con canela molida por encima.
Listas para degustar.

Comentarios

  1. Puri cómo nos gustan en mi casa las Poleás, tanto que las he llegado a compartir dos veces, solo por el placer de hacerlas, la segunda vez ya tenía un poquito más idea de esto de bloguear, y mejoré la redacción de la receta, pero luego en el primer post, cambié algunas fotos y la receta por si alguien la consulta que les salga perfectas. No hace ni una semana que las hizo mi marido, y al enseñarle las tuyas, me ha dicho que mañana o pasado en cuanto empiece a llover las volverá a hacer, que es cuando suelta los pinceles y deja de pintar por falta de luz y se mete en la cocina para quitarme un golpe, Jajajaja...
    Tu receta es diferente, pero imagino que en esencia, los sabores son iguales, ya que llevan los mismos ingredientes.
    A mí lo que más me gusta es que cada cucharada lleve un picatoste crujiente o como los llamamos en Sevilla “coscorrones”, mi madre los metía dentro de las Poleás y se ponían húmedos y yo los dejaba aparte, jajajajaja...
    Besos.

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  2. Hola Puri! las gachas creo que es algo parecido a lo que me hacia mi madre cuando éramos niñas y que nosotros llamamos papas, mi madre las hacía de harina o de maicena la mayoria de las veces, aunque no llevaban aceite ni matalahuva, y se le p0nía azúcar encima. No se, creo que debe ser algo parecido, estas gachas han quedado maravillosas seguro..Bess

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  3. Nosotros las conocemos como gachas, por aquí se llaman poleás o espoleás, pero la receta es la misma. Cierto que llenan mucho, si las hacemos de cena con un cuenco tendremos suficiente hasta el día siguiente, aunque merece la pena incluso darse una caminata después para bajarlas por el placer de comerlas. Yo las preparo pelín más blanditas, con el mismo paso a paso.
    Bss

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  4. Me encantan y sobre todo con esos picatostes crujientes , son un bocado especial.
    Recetas tradicionales que nos acompañarán de por vida.
    Un abrazo.

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  5. Es de esas recetas que se hacían antiguamente para alimentar a grandes familias con pocos ingredientes, eran otros tiempos, pero siguen vigentes y con esos sabores tan ricos que tocará probar algún día.
    Besos.

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  6. Hola Puri, por aquí no creo que se hagan, pero las conocía gracias a los blogs. La matalahúva aquí la llamamos "llavoretes" en valenciano y me encanta en los postres. Estoy segura de que tus gachas dulces o poleás, me gustarían mucho por el sabor a canela también.
    Besos y cuidaos.

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  7. En casa nos encantan y no faltan ningún año para estas fechas!! Las tuyas se ven riquísimas!!Bs.

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  8. Puri, Que pinta tienen estas gachas, que están super deliciosas
    Un abrazo.

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  9. Aunque por donde vivo no es un plato muy conocido si lo tengo muy escuchado de tu zona, recuerdo a la tia Encarna diciendo niña quieres unas gachas, pero yo nunca las he probado!!
    Un beso

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  10. Ainsss, qué rica s Puri. en mi casa en invierno las hago con frecuencia, las comemos calentitas. A mi padre le encantaban, las de él con muchos picatostes, je je je!! te han quedado delciosas, en su punto y las fotos son espectaculares. Un beso!

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  11. Por aquí se le dicen gachas sipre las he oído pero nunca las he echo a ti te han quedado de cine y yo las voy hacer siguiendo tu receta Mil besicos cielo

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