ENSALADA DE PASTA Y POLLO CON SALSA DE NARANJA

Después de un fin de semana de excesos vamos a comenzar la semana con algo ligerito... una ensalada.
Una ensalada no tiene por que ser aburrida, podemos elaborarla con muchísmos productos y
enriquecerla con una deliciosa salsa, algo tan sencillo es lo que os traigo hoy,
una ensalada de pasta y pollo con salsa de naranja, la salsa es una elaboración de mi amiga Puri,
que la emplea en numerosas recetas, bien sea en ensaladas, para acompañar con patatas fritas tipo paja,
o para un cóctel...en fin que le vamos a sacar buen partido a esta exquisita salsa, si además la ponemos
en una ensalada como ésta...todo un lujo de receta.
Gracias Puri por compartir estas delicias con nosotr@s!!!
                                      !!! Simplemente deliciosa...!!!


           Para darle color le he puesto un poco de ketchup, pero que no le hace falta.

Ingredientes:

250 g de pasta de colores, yo de corazones
1 pechuga de pollo
1 manzana cortada a taquitos
un puñado de nueces troceadas
queso semicurado cortado a taquitos
aceite de oliva
sal
hojas de hierbabuena para decorar

salsa de naranja
mayonesa
ketchup
el zumo de 1 naranja

Elaboración:

De la salsa no os pongo cantidades ya que la he hecho a ojo, eso sí, no tiene que quedar muy líquida.
En primer lugar exprimir la naranja,
echar unas cucharadas de mayonesa y poner un chorrito de ketchup, removemos bien y si vemos que  queda muy ligera añadimos más mayonesa.
Una vez conseguido la textura ideal de la salsa, la tapamos y guardamos en en frigorífico.
Ponemos a cocer la pasta en agua bien caliente y con sal, cocinamos como indica en el envase el fabricante, tenemos cuidado de no pasarla, tiene que quedar al dente.
Escurrimos bien y la pasamos por agua fría, la dejamos en el escurridor hasta que pierda todo el agua.

Ponemos la pasta en un bol y le añadimos un poco de aceite de oliva. Dejamos templar.
Cortamos en dados la manzana pelada y la añadimos a la pasta, echamos también el queso cortado en dados y las nueces troceadas. Envolvemos bien y reservamos.
Asamos la pechuga entera en un poco de aceite, le ponemos un poco de sal y pimienta molida.
Una vez asada la sacamos y la cortamos en medallones gruesos.
En una fuente de servir ponemos la pechuga un poco separada pero guardando su forma inicial.
Al lado colocamos la pasta con el queso, la manzana y las nueces.

Salseamos un poco la ensalada y ponemos la salsa sobrante en un bol, para que cada comensal se ponga al gusto.
Servimos la ensalada adornada con unas hojas verdes y unas rodajas de naranja.

Lista para comer tanto templada como fría. 

           Riquísima y con una salsa que la hace exquisita.